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La playa es absolutamente impresionante y cuenta con una atmósfera serena e intacta sin instalaciones ni comodidades turísticas.
Si eres un aficionado a las playas aisladas y poco desarrolladas, y no te importan las piedras, entonces la playa de Mesovrika en Antipaxos es el lugar perfecto para ti. Se trata de una pequeña cala situada en el lado noreste de la isla, enclavada entre las populares playas de Voutoumi y Vrika. La playa está formada por pequeñas y grandes piedras blancas, con rocas que se extienden a ambos lados de la bahía, lo que proporciona una sensación de privacidad a pesar de la presencia de yates privados. Si tienes tu propio barco, es mejor visitar la playa antes de las 11 de la mañana o tarde en la tarde, ya que puede haber barcos turísticos de 11:00 a 12:00. El snorkeling es una actividad popular cerca de las rocas, pero asegúrate de revisar si hay medusas antes de entrar en el agua. No hay instalaciones en la zona de Mesovrika, pero puedes encontrar tabernas diarias en Vrika o Voutoumi a solo cinco minutos a pie de los senderos laterales. Ofrecen comidas y también alquilan tumbonas y sombrillas.
Aunque la playa es innegablemente hermosa, desafortunadamente cae víctima de su propia popularidad como un lugar 100% turístico. Los visitantes vienen, nadan y se van, con cientos de personas acudiendo al agua por solo una hora antes de continuar. Mi experiencia no fue diferente, ya que había reservado un viaje en barco desde Corfú a Paxos y Antipaxos. Sin embargo, encontré que la playa tenía sus momentos de tranquilidad por la mañana y por la tarde, antes y después de que llegaran los barcos. Dicho esto, encontré algunas medusas moradas en el agua que hicieron que nadar fuera menos agradable. De hecho, conté entre 5 y 7 de ellas y, en última instancia, decidí dejar de nadar y evitar volver a ese lugar en particular.
La playa presume de aguas turquesas impresionantes que son bastante saladas. A pesar de su profundidad, se puede nadar sin esfuerzo y disfrutar de la clara vista de las piedras en el fondo. Nadar en estas aguas prístinas es realmente una experiencia increíble y muy recomendable.
El color turquesa del mar es verdaderamente impresionante y casi increíble. A pesar de la belleza del lugar, tiende a atraer a un gran número de turistas y barcos grandes. Es recomendable optar por un barco privado y visitar en la tarde.